Yo estuve allí...

Durante toda mi carrera en la Universidad muchos de mis profesores remarcaban que el aporte distintivo de la Antropología es el famoso "Yo estuve allí" de los etnógrafos, con Malinowski a la cabeza. Este "yo estuve allí" era una forma de validar sus observaciones, análisis e interpretación de las culturas que estudiaban, en contraposición con los llamados "antropólogos de sillón", que escribían sin salir de su escritorio; sin haber salido de su cultura. Esta experiencia transcultural daba a los etnógrafos la autoridad para decir "esto que estoy describiendo es verdad, porque yo estuve allí y lo ví con mis propios ojos".

Todo esto para decir que "nosotros estuvimos allí" el día que Fidel se largó a caminar. ¡Qué emoción! Esa tarde del 29 de Junio quedará grabada en nuestras memorias.

Otra tarde de domingo repetimos la experiencia sobre la mesa de ping-pong.

Gracias, Dios por dejarnos disfrutar de las cosas tan simples y tan maravillosas a la vez.
Estos regalos cotidianos nos muestran tu amor, tu presencia y tu sentido del humor.